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Presentada el pasado mes de enero en el marco del Salón Internacional de la Alta Relojería de Ginebra, la línea Jaeger-LeCoultre Polaris se enriquece ya con un nuevo modelo: el Polaris Geographic WT, producido en edición limitada de 250 piezas y disponible solo en boutiques. Su diseño se inspira en el Memovox Polaris de 1968, un modelo emblemático de la Grande Maison. Si bien sus curvas totalmente replanteadas demuestran una elegancia deportiva para el uso cotidiano, su espíritu audaz y aventurero permanece inalterado. Su caja de 42 mm alberga el calibre mecánico Jaeger-LeCoultre 936A/1 de carga automática, que aporta una novedad a la línea: la función géographique, que acompañará tanto al hombre activo como al viajero.

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Una función emblemática de Jaeger-LeCoultre que invita a viajar
El Polaris Geographic WT (por World Time) invita a la exploración del mundo y de las 24 zonas horarias, visibles inmediatamente sobre un realce que se activa mediante la corona, situada a la altura de las 10 horas. Para las ciudades que han adoptado el sistema de ajuste de la hora local en verano y en invierno, un discreto asterisco blanco indica este desfase de una hora.

Esfera elegante y técnica para el hombre activo
La esfera, auténtica firma de la línea, ilustra perfectamente la sutil alianza de los dos colores de la línea Jaeger- LeCoultre Polaris: el azul evolucionando hacia el negro. La esfera azul ahumado confiere al reloj una impresión de gran profundidad. Además presenta tres acabados: opalino para el disco de las ciudades, azuleado para las esferas subsidiarias del calendario a la altura de las 2 horas, del segundo huso horario a las 6 horas y de la reserva de marcha a las 10 horas, y granallado para el fondo de la esfera.

El disco día/noche, que se reconoce inmediatamente por su división negro/blanco, permite que correspondan la hora diurna o la nocturna con la ciudad, y por consiguiente con la segunda zona horaria. Un pequeño detalle que no dejará de atraer las miradas: este disco lleva un pequeño sol que indica las horas diurnas –dígitos negros sobre fondo blanco– y una pequeña luna creciente que indica las horas nocturnas –cifras blancas sobre fondo negro.

El origen de un reloj emblemático
La nueva línea Jaeger-LeCoultre Polaris se inspira en un modelo emblemático de la Grande Maison: el Memovox Polaris de 1968, cuyo diseño se reconoce inmediatamente gracias a sus tres coronas. En aquel entonces, el mercado americano sugirió el nombre Polaris para evocar el espíritu de audacia y aventura característico de los años sesenta. Este nombre, sinónimo de libertad y de vanguardia, también se aplicaba a una revolución: un reloj de buceo equipado con una función despertador y cuya caja estaba dotada de un triple fondo patentado que optimizaba la difusión del sonido bajo el agua. En aquella época, este espíritu se resumió en un eslogan: “Para el hombre de acción”. Se produjeron 1714 unidades del Memovox Polaris entre 1965 y 1968. La caja del Polaris 2018 se replanteó íntegramente: las asas se acortaron y el bisel se afinó para dar al reloj un aspecto más contemporáneo y una gran legibilidad. Los acabados pulido-cepillado refuerzan el espíritu deportivo de la línea y el cristal de zafiro reemplaza al plexiglás.

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